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Sheinbaum apoya Cablebús en Puebla: menos tráfico y más movilidad

El gobierno federal ofrece asesoría técnica para implementar el proyecto en Puebla

La presidenta Claudia Sheinbaum respaldó públicamente el ambicioso proyecto de Cablebús en Puebla, una iniciativa encabezada por el gobernador Alejandro Armenta, que busca transformar la movilidad urbana en la capital poblana. El objetivo central del proyecto es conectar zonas de alta marginación con los principales centros urbanos, reduciendo drásticamente los tiempos de traslado.

Con experiencia en la implementación de sistemas similares durante su gestión en la Ciudad de México, Sheinbaum explicó que este tipo de transporte ha demostrado ser una solución eficiente para ciudades con geografía desigual y densamente pobladas, como lo es Puebla. En su administración, la capital del país vio el desarrollo de tres líneas de Cablebús, incluyendo una que fue reconocida como la más larga del mundo. Esta experiencia, indicó, está siendo aprovechada para ofrecer asesoría técnica desde el gobierno federal en proyectos similares en otras entidades.

El plan en Puebla contempla una línea inicial que irá desde La Resurrección hasta Angelópolis, atravesando el corazón de la ciudad sin afectar zonas de valor histórico. Para garantizar esto, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ya realiza estudios para verificar que la ruta no impacte el patrimonio cultural.

Alejandro Armenta ha insistido en que el proyecto se encuentra en su fase de anteproyecto, y ha recalcado que se están tomando todas las previsiones necesarias para que la obra sea respetuosa del entorno urbano y patrimonial. Por su parte, Sheinbaum dejó claro que los estudios de factibilidad y los permisos correspondientes siguen en curso, subrayando la importancia de un enfoque integral en el desarrollo urbano.

Este impulso desde el gobierno federal refuerza una política de movilidad más equitativa e incluyente, en la que el transporte público se convierte en un derecho y no en un privilegio. La visión compartida entre Sheinbaum y Armenta apunta a una ciudad más conectada, sostenible y justa.