
Familia de “Kiki” Camarena demanda a Caro Quintero, “Don Neto” y Félix Gallardo
La demanda se basa en la Ley Antiterrorista de 1991 para buscar justicia por un acto de terrorismo internacional
La familia de Enrique “Kiki” Camarena, agente de la DEA asesinado en 1985, presentó una demanda civil ante la Corte del Distrito Sur de California contra tres de los principales miembros del extinto Cártel de Guadalajara. En esta demanda, los familiares de Camarena acusan a Rafael Caro Quintero, Ernesto Fonseca Carrillo, conocido como “Don Neto”, y Miguel Ángel Félix Gallardo, “El Jefe de Jefes”, de haber sido responsables del secuestro, tortura y asesinato del agente estadounidense. El caso busca una indemnización millonaria por los daños y perjuicios sufridos, fundamentándose en la Ley Antiterrorista de Estados Unidos.
Los demandados, quienes fueron figuras clave en el Cártel de Guadalajara, enfrentan acusaciones por actos de terrorismo internacional, homicidio premeditado y agresión física, entre otros cargos. Esta demanda llega en un momento crucial, ya que Caro Quintero, uno de los principales acusados, fue extraditado recientemente a Estados Unidos, donde se le procesará por narcotráfico, lavado de dinero y conspiración para asesinar.
En febrero de 1985, Camarena fue secuestrado a plena luz del día en Guadalajara, frente al Consulado de Estados Unidos. Fue llevado a una propiedad de Caro Quintero, donde estuvo bajo tortura durante más de 30 horas. Su cuerpo apareció semanas después en una zona rural de Michoacán, junto al cadáver del piloto Alfredo Zavala, quien también fue asesinado. Para la familia de Camarena, el asesinato no fue un hecho aislado, sino parte de una estrategia del cártel para intimidar a las autoridades tanto de Estados Unidos como de México y así garantizar la impunidad y continuar con sus operaciones criminales.
La demanda se basa en la Ley Antiterrorista de 1991, que permite a las víctimas de actos terroristas demandar indemnizaciones por los daños sufridos cuando los ataques provienen de organizaciones designadas como terroristas fuera del territorio estadounidense. De acuerdo con los demandantes, el secuestro y asesinato de Camarena fueron actos dirigidos a influir en las políticas de ambos gobiernos mediante la violencia y la intimidación.
A través de esta demanda, la familia Camarena busca una compensación económica por los daños físicos, emocionales y psicológicos sufridos durante más de 40 años. Además de la indemnización por las secuelas personales, también se pide la aplicación de sanciones punitivas contra los responsables, con el fin de que el Cártel de Sinaloa, la organización vinculada a los demandados, contribuyera a la reparación del daño. La familia también busca que los bienes decomisados a los implicados sean utilizados para cubrir la indemnización.
La viuda de Camarena, Geneva Mika Camarena, y sus hijos Enrique Jr., Daniel y Erik, así como otros familiares, son los principales afectados que buscan justicia. Tras más de cuatro décadas de dolor y sufrimiento, la familia reclama que los responsables del asesinato de “Kiki” Camarena enfrenten consecuencias severas, tanto a nivel económico como penal.
Este proceso legal, además de la demanda por la reparación de los daños causados, también tiene como objetivo generar un precedente en la lucha contra el crimen organizado y el terrorismo internacional, buscando que los responsables enfrenten la justicia por el asesinato de un funcionario estadounidense en territorio mexicano.