
China lanza primera embarcación sumergible no tripulada de alta velocidad
El modelo de ingeniería comenzó en junio de 2024, con pruebas y ensayos programados para su debut operativo en 2026
Hoy lunes, en la ciudad de Zhuhai, ubicada en la provincia meridional de Guangdong, China, fue botada la “Ballena Azul”, una innovadora embarcación no tripulada que puede operar tanto en la superficie como bajo el agua. Este lanzamiento es un importante avance en la tecnología marina de China, y resalta el progreso en el desarrollo de equipos oceánicos inteligentes.
La “Ballena Azul” ha sido diseñada para ser completamente versátil, capaz de alcanzar velocidades de hasta 36 nudos en la superficie, y tiene la capacidad de sumergirse para evitar condiciones meteorológicas extremas, como los tifones. Además, puede permanecer suspendida bajo el agua durante más de un mes, lo que le permite ofrecer respuestas rápidas en situaciones de emergencia y servir en áreas como meteorología, cartografía submarina, fotografía, muestreo de agua, y mantenimiento de infraestructuras submarinas, como los cables de comunicación.
Wu Guosong, el ingeniero jefe del proyecto de Zhuhai Yunzhou, destacó que uno de los aspectos más notables de la nave es su habilidad para desplegar cohetes y sensores meteorológicos cerca de los epicentros de los tifones. Esto permitiría la recolección de datos atmosféricos y oceánicos esenciales para mejorar la predicción y respuesta ante desastres naturales.
Por su parte, Chen Dake, miembro de la Academia de Ciencias de China, calificó este desarrollo como un punto de referencia significativo en la innovación tecnológica autónoma de China en el ámbito marino. Según Dake, la “Ballena Azul” jugará un papel crucial en la exploración oceánica y contribuirá a los objetivos estratégicos del país en el campo de las ciencias marinas.
La construcción del modelo de ingeniería comenzó en junio de 2024 y ha involucrado procesos complejos como la soldadura resistente a la presión y el ensamblaje del casco. Actualmente, se encuentra en las fases finales, que incluyen la depuración de los sistemas internos y las pruebas marítimas, las cuales avanzan según lo previsto. El debut operativo de la embarcación está programado para 2026, lo que marca un paso decisivo para su futura implementación en operaciones reales.