
Con biotecnología, BUAP busca fortalecer el agave mezcalero en Puebla
Detectan hongos, crean un sensor para identificar patógenos y determinan bacterias y levaduras en su proceso de fermentación.

Puebla, Pue.- Para fortalecer la producción de mezcal en el estado de Puebla, cuya fabricación en 2022 fue cercana a los 500 mil litros, investigadores de la BUAP realizan un proyecto de colaboración con el Instituto Politécnico Nacional (IPN), que involucra la detección de hongos que dañan a la planta, el desarrollo de un biosensor para identificarlos, la determinación de bacterias y levaduras en el proceso de fermentación de esta bebida, hasta el aprovechamiento de residuos y conservación de germoplasma de especies nativas.
Por parte de la Máxima Casa de Estudios en Puebla participan los doctores Vianey Marín Cevada, Liliana López Pliego y Miguel Castañeda Lucio, del Instituto de Ciencias (ICUAP); así como Luis Ramiro Caso Vargas, de la Facultad de Ciencias Biológicas. Además de científicos del Centro Interdisciplinario de Investigación para el Desarrollo Integral Regional (CIIDIR), del IPN, unidades Sinaloa y Durango: Carlos Calderón Vázquez, Hervey Rodríguez González, Claudia Castro Martínez y René Torres Ricario.
La investigación, aprobada en julio de 2024 y con finalización prevista para diciembre de este año, se estructura en seis áreas principales. Estas incluyen el estudio y preservación del material genético de agave, la caracterización de microorganismos involucrados en la producción de mezcal y la evaluación de la calidad del producto final.
Además, se abordan estrategias para el aprovechamiento sostenible de los subproductos generados en el proceso, su aplicación en la acuicultura y la producción de biocombustibles. Asimismo, se investiga la presencia de hongos fitopatógenos en el agave, se identifican bacterias clave en la fermentación del mezcal y se promueve la transferencia de conocimientos biotecnológicos a los productores, para su aplicación en el sector.
Ciencia a favor de una bebida milenaria
La doctora Vianey Marín Cevada, académica adscrita al Centro de Investigaciones en Ciencias Microbiológicas del ICUAP, explicó que el proyecto se desarrolla en San Bernardino Tepenene, municipio de San Juan Tzicatlacoyan; así como en Atlapulco y San Nicolás Huajuapan, en el municipio de Huehuetlán el Grande, comunidades en las cuales se conoció el estatus y características morfológicas del cultivo.
En la zona de estudio se identificaron cuatro especies principales de agave: papalometl, cupreata, espadín y espadilla. También se observó necrosis en las plantas por presencia de hongos patógenos, situación traducida en pérdidas para los productores. Por ejemplo, de 4 mil ejemplares sembrados hace cuatro años en un plantío ubicado en la comunidad de Tepenene, actualmente se conserva aproximadamente la mitad. Cabe mencionar que la madurez del maguey comprende un periodo de 7 a 12 años.